¿Por qué quiere Santini un CRIM propio?

Con un CRIM propio, Santini pretende subir los impuestos a la propiedad y recoger más dinero de los ciudadanos con casa propia. Esta es obviamente la jugada detrás de lo del CRIM. Teniendo en cuenta que las contribuciones al CRIM se reparten hoy en día siguiendo quién sabe qué criterios a todos los municipios, el establecimiento de un CRIM independiente para San Juan repercutirá en muchos menos fondos llegando a los municipios fuera del área metropolitana. Y con ello vendrán aumentos de los impuestos sobre la propiedad por toda la isla o despidos a mansalva de empleados públicos.

El asunto del CRIM es simplemente un problema jurisdiccional, en el que cada área geográfica pretende barrer para su lado. El problema del país es la desproporcionada demografía que tenemos, que provoca que al salir San Juan del CRIM, éste pase a un segundo plano en el que se fuerce el despido de miles de empleados públicos.

Es difícil tomar posiciones en el asunto. Por un lado, la descentralización del sistema podría repecutir en una mayor eficiencia, meta que nos debería guiar siempre. Pero por otro lado, la ineficiencia del CRIM sostiene miles de empleos que aunque no sean muy bien pagados, son empleos.

Una de las mayores diferencias entre el sistema de tributación de impuestos entre PR y EEUU son los impuestos sobre la propiedad privada. Como toda diferencia entre ambos países, el PNP quiere eliminarla. En los EEUU, la mayoría de los impuestos sobre la propiedad se utilizan para financiar el sistema público de enseñanza y los cuerpos de policía municipales.

No nos cabe duda que el PNP tiene esto como una prioridad en su empeño a que seamos algún día parte integral de los EEUU. Lo primero es que San Juan, baluarte del PNP, tenga su propio CRIM y que comience a subir los impuestos poco a poco. Si las subidas se hacen a un ritmo acelerado, cosa que no dudamos Santini tenga en mente, el número de propietarios que se vean obligados a vender sus hogares subirá rápidamente. En el peor de los casos, en unos años veremos la utilización de los puentes del país como hogares de los desahuciados.