Algún día nos daremos cuenta

Comencemos por el ELA. Esta fórmula ya caducó hace 20 años. Ya no sirve de mucho. La concepción en la que se creó el ELA, con un objetivo claro de sacar al país de la miseria cambiando el modelo económico de agrícola a industrial bajo una “alianza política” entre PR y EEUU dejó de tener sentido cuando EEUU comenzó a firmar tratados de libre comercio con un montón de países latinoamericanos y asiáticos. Y si esto no fuera poco, luego EEUU “ilegalizó” las 936… para que no tuviéramos más privilegios. El ELA ya no funciona…

Sigamos con la ESTADIDAD. El concepto de estadidad descansa en la idiota idea de que el colonizado podrá sentarse a comer a diario a la mesa con el colonizador… esto nunca ha sucedido en la historia de la humanidad… El ejemplo de Hawai lo confirma: mientras el dinero del turismo y de las plantaciones de caña y piña se va directamente a las arcas de las empresas anglosajonas americanas, los hawaianos están “legalmente” restringidos a limpiar las habitaciones hoteleras, y preparar hamburguesas en los Burger Kings… Los hawaianos dan pena. Y el paisaje paradisiaco y el clima no se los quitan porque no pueden.

Terminemos con la INDEPENDENCIA. El concepto romántico de independencia con el que se ha fomentado esta alternativa también ha caducado desde hace mucho tiempo. Hay que empezar a ver esta posibilidad desde el punto de vista pragmático… sí, pragmático. Los que se creen pragmáticos porque descartan la independencia por razones económicas cometen un grave error. La situación económica “legal” de PR es una basura debajo del “amparo” americano. ¿No ha sido suficiente que nos hayan destruido la jugada de que nuestros productos entren sin problema alguno a EEUU cuando ya lo hacen decenas de países? ¿Tampoco ha sido suficiente que nos hayan desbaratado la jugada de las 936? ¿Qué más quieres que nos hagan, pragmático económico? ¿Qué pongan impuestos a nuestros productos? Si no han hecho esto todavía es porque no encuentran la manera de hacerlo. La independencia no representa la destrucción económica ni mucho menos. Al contrario, representa la llegada de un montón de inversionistas extranjeros que por codicia levantarían en nuestro país un sector turístico de puta madre… ¡por muchos errores que cometan los gobiernos que tengamos! Y miles de empresas de asesoría técnica e industrial montarían sus kioskos en nuestra isla, para ofrecer servicios por todo el Caribe y América Latina.

Claro, lo que da mucho miedo de la independencia es la calidad de los gobiernos que tengamos, que como sean como los que hemos tenido o tenemos se podría hacer el argumento de que nos hundiríamos con la isla y todo. Pero… ¿podrían realmente estar las cosas peores de lo que están? Creemos que no, simplemente porque los inversores extranjeros traerían miles de trabajos de buena calidad a la isla, y un boom económico que haría que las actividades ilegales no tuvieran los alicientes (o al menos la proporción dinero – riesgo de morir o ser encarcelado no sería tan atractiva) que tienen hoy debido a que nos estamos ahogando en la miseria.

Claro, si nos hacemos independientes antes de que Cuba regrese a ser capitalista, mucho mejor…

Lo curioso de todo esto es que aunque casi nadie se dé cuenta a un nivel consciente, ya hay muchos que comienzan a darse cuenta inconscientemente de que aunque pasen 100 años más, la única salida real de todo este lío es la independencia. Todavía no estamos preparados, pero con los golpes que nos dan desde la metrópoli, por muy idiotas que seamos, llegaremos a entender las cosas como son. Y una vez seamos independientes, pensaremos: ¿cómo no se nos ocurrió esto antes?