La niña de 4 años, Iranis Montañez Claudio, que fue ahorcada por su padre se hubiera graduado de medicina en el año 2031, y hubiera terminado la especialización de osteopatía en el 2034. Su vida profesional hubiera durado unos 40 años, en los cuales hubiera atendido un estimado de 56,000 pacientes puertorriqueños. Su dedicación a la curación de enfermos hubiera repercutido en miles de familias puertorriqueñas. Además, Iranis hubiera dado a luz a 2 niñas y un niño, que hubieran gozado de una hermosa infancia y hubieran sido ciudadanos ejemplares en nuestro país.
Iranis se nos ha ido mucho antes de su tiempo. Nuestro país ha perdido mucho con su asesinato. Descansa en paz, Iranis.
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