Parece que no pasa ni un día sin que Miguel Cordero repita el mismo discurso a favor del gasoducto conocido como Vía Verde. Ya nos va pareciendo este señor al típico político que cuando no convence se dedica a extenuar a su audiencia repitiendo la misma cosa hasta que no aguante más y apruebe el proyecto por agotamiento. Nos parece que el señor Cordero es el tipo de persona que cuando no funcionan las cosas se esconde y no dice ni pío. Así que si hubiera un accidente en el gasoducto y murieran unos pobres campesinos que estaban por mala suerte por allí o una familia de clase baja por cuya casucha pasara cerca el ducto, no nos extrañaría que este señor no diría absolutamente nada, o lo que sería peor, le achacara la responsabilidad a cualquier otro, si es que es como tantos otros...
El Coquí Cojo quiere decirle al señor Cordero que recapacite y no insista tanto, que la gente está asustada desde el accidente de los depósitos de combustible en Cataño, que supuestamente no podía pasar… siempre y cuando el mantenimiento se llevara a cabo como Dios manda… pero sabemos que el señor Cordero sabe que en Puerto Rico no se le da mantenimiento a nada, por una razón u otra, por ahorrarse tiempo y dinero, o por simple vagancia. El señor Cordero sabe my bien que después de un tiempo más corto que largo, se dejará de darle el mantenimiento adecuado al gasoducto Vía Verde (nombre que todos sabemos es simplemente una mentira publicitaria para que suene ecológico e inofensivo).
Si se cae un molino eólico no pasa nada, si se cae un panel solar tampoco pasa nada, pero si explota un gasoducto se borra del mapa un barrio de San Francisco. Y sabemos que económicamente el gasoducto podría ahorrarnos dinero, pero lo que no queremos es el peligro que representa. Además, a medio plazo los parques eólicos y las granjas de paneles solares son más económicos y eficientes. Y nos garantizan el “combustible” para siempre ya que el aire y el sol son nuestros, gratis y eternos, mientras el gas natural sería importado.
Señor Cordero, mueva a la AEE al siglo XXI y pongamos molinos de viento y paneles solares. Si hacemos un parque eólico… con el mismo dinero que se ha calculado para Vía Verde (que el señor Cordero sabe que el gasto final será 3 veces el que estiman ahora para convencer a la gente y la mitad se lo embolsillarán las partes correspondientes, lo que a su vez explicaría tanta insistencia del señor Cordero)… ¿Cuántos megavatios de electricidad se podrían producir? ¿Cuál sería el tiempo para recuperar la inversión? A largo plazo el gas que pasará por el gasoducto nos costará mucho más que el viento que moverá las aspas y el sol que calentará los paneles ($0). Y seamos realistas, el mantenimiento de ambas alternativas no será muy bueno, pero al menos el parque eólico no explotará. Es muy posible que el mantenimiento del gasoducto sea mucho más caro que el del parque eólico.
El Coquí Cojo desea de todo corazón que el señor Cordero pase a la historia del progreso de Puerto Rico por méritos que sean realmente benéficos. ¡El Parque Eólico Miguel Cordero suena mucho mejor!
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