Fortuño llevaba días con el resquemor del almuerzo entre Obama y su contrincante García Padilla. Así que según nuestros informadores, Fortuño comenzó a preguntar a sus secuaces quién querría almorzar con él. Al parecer la cosa no le fue muy bien y ha tenido que conformarse con Norma Burgos, senadora de su propio partido, con la que almorzó hoy.
A cambio de almorzar con él, Norma probablemente ha obtenido el apoyo clandestino del gobernador a sus aspiraciones a alcaldesa de Caguas.
El efecto al comparar los dos almuerzos es un tanto surrealista dado el abismal salto en envergadura entre Norma y Obama, pero a falta de pan, galleta.
Lo que haría falta es que Fortuño dijera que eso de comerse un medianoche al mediodía es una pendejada…
1 comment:
LOL
Post a Comment