El movimiento estudiantil regresa a sus actividades de boicot de clases esta mañana. Para muchos puertorriqueños, los estudiantes están provocando el regreso de la policía y por tanto, están demostrando que la decisión inicial de desplegar a la policía en los recintos fue la acertada. Sin embargo, El Coquí Cojo quiere explicarles a sus lectores que el movimiento estudiantil no puede dejar que las “hostilidades” se paren ya que la muerte del movimiento podría tener lugar si la apatía de gran parte del estudiantado tomara fuerza.
La falta de actividad de protesta es dañina al movimiento, y la administración lo sabe muy bien y es parte de su estrategia. Por ello siempre retrasa descaradamente todo intento de negociación. En este caso, la administración se está aprovechando del cambio de presidente para ello. El presidente se hace el tonto, se escuda diciendo que se reune la semana que viene con los demás administradores para enterarse de lo que pasa, etc., etc.
No prevemos que el nuevo presidente aporte nada a cambiar la situación en el conflicto. Recordemos que lo primero que dijo, incluso antes de posar las nalgas todavía en la silla de su nuevo cargo, fue que el regreso de la policía a los recintos no está ni mucho menos descartado. Fue ridículo decir que si los estudiantes se portaban bien, la policía no regresaría. El problema es que la estrategia sirve bien para un pueblo desinformado, y bastante inculto sobre estos asuntos, y sobre todo, harto de la violencia en el país, que lamentablemente compensan transfiriendo el resentimiento a los criminales, a los estudiantes.
Ojalá nos equivoquemos y Miguel Muñóz rompa el ciclo vicioso y se siente con los estudiantes y negocie de buena fe, es decir, que todos los lados cedan y se pongan de acuerdo.
Recordemos que la retirada de la policía no sólo beneficia a los estudiantes, sino al mismo gobierno. Por ejemplo, la imagen del gobierno comenzaba a ser bochornosa en el exterior, incluyendo los EE.UU. Además, los gastos eran realmente indefendibles, y el alza en la tasa de asesinatos que hacía un tanto impopular que la policía estuviese mirando los árboles de los recintos en lugar de patrullar las calles.
Desde el punto de vista económico, el conflicto ha sido la imbecilidad más grande en la historia del país. Desde el principio, la recaudación que se pretendía con la cuota no tenía sentido. Los 40 millones de recaudación que se planificó con ella preveía una población de 50,000 estudiantes en el sistema UPR, es decir, ya contaba con una merma de más de 10,000 estudiantes. En realidad, la UPR ha perdido en poco más de un año, unos 14,000 estudiantes (de 68,000+ a 54,000+). En otras palabras, la administración sabía desde que ideó lo de la cuota, que perderían más de 10,000 estudiantes, y con ellos, los pagos por matrícula. Es decir, que los 40 millones de ingresos adicionales serían en realidad unos 30 aproximadamente.
Con la policía, el gobierno ya se ha gastado más de 10 millones… Con la publicidad, unos cuantos millones más… En fin, hasta un niño de 5to grado puede ver la estupidez de todo esto.
En fin, ya de esto hemos hablado mucho en El Coquí Cojo. Invitamos a nuestros lectores a que revisen los archivos de nuestro blog.
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