Hace unos días vivíamos la evaluación ética de Farinacci en la Cámara de Representantes. Se dijo en muchísimas ocasiones que se carecían de normas y regulaciones para saber qué hacer en caso de que se votara contra el sujeto.
Por otro lado, el gobierno no para de emitir leyes que coartan la libertad de expresión, y movimiento en general, del movimiento estudiantil. Dentro de una hora escasa, decenas de estudiantes quizá sean arrestados por la nueva ley firmada el viernes pasado haciendo delito el obstruir el acceso a la educación.
No creemos que sea difícil de vaticinar que el Senado y la Cámara de Representantes tardarán muchísimo, si es que llegan a hacerlo, en emitir leyes y regulaciones de cómo tratar a los representantes y senadores que peguen a sus cónyuges, simplemente porque son ellos los que estarían sujetos a dichas leyes…
Otra cosa curiosa, creemos que el mayor violador de la ley del viernes es la propia administración universitaria, que con sus medidas, han de facto expulsado, es decir, obstruido del acceso a la educación, a más de 17,000 estudiantes en lo que va de su mandato. Por lo tanto, esperamos que alguien lleve a juicio a la administración en pleno.
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