Tenemos que importar leche en polvo, y ¡ya está! Y que la gente no haga como un tío mío que me contó cuando era pequeño:
- Me acuerdo que los americanos nos mandaban latas de leche en polvo, y nosotros que estábamos muriéndonos de hambre tratábamos de comer aquello que era intragable…
- Pero tío, si la leche en polvo sabe casi igual que la leche normal.
- Eso lo dirás tú, pero me acuerdo como si fuera hoy que se nos secaba la boca con dos cucharadas de aquella cosa…
- ¡Pero tío Lalo! ¿No mezclaban los polvos con agua primero?
- ¿Había que hacer eso? ¡Ahora me explico por qué aquello era tan horrible!
1 comment:
jajajaajajajajajaajaj esta muy bueno...
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