Que alguien ayude a Don Roberto

En El Nuevo Día de hoy aparece la noticia en la que el alcalde de Lares, Roberto Pagán, opina sobre el escándalo del fraude de AFLAC, en el que se han visto involucrados 78 de sus empleados municipales. Según Don Roberto, sus empleados fueron engañados, y que la verdadera culpable de fraude es AFLAC, ya que sus vendedores de seguros utilizaron estrategias ilegales al prometer cosas que resultaron ser las motivadoras de que los acusados hayan rellenado miles de reclamaciones.

En fin, por un lado nos da pena que don Roberto no sepa callarse cuando no sabe nada de lo que ha estado pasando bajos sus propias narices, no sólo en su alcaldía, sino en toda la comunidad de la que es presuntamente alcalde. Sin embargo lo entendemos, a cualquier persona que le sorprendan con los calzoncillos abajo, tiende a subírselos de inmediato. A don Ramón le cogieran en la más profunda inopia y ahora quiere hacerse el enterado… y para ello se fía de sus empleados, que de seguro le han estado timando desde que se hizo alcalde.

Lo irónico del caso de este hombre es que mientras todo esto pasaba, se dedicaba a cambiarle el lema al pueblo de Lares, cuyo lema de siempre es quizá el más significativo de todo el Caribe, y a comisionar y gestionar una estatua cuyo significado ni siquiera él ha sido capaz de explicar.

El Coquí Cojo le recomienda a don Roberto que comience a pensar que puede dedicarse a otras cosas y dejar la alcaldía lo antes posible. Y que no se siga embarrando defendiendo las actividades ilícitas de cientos de lareños…

Además, queremos denunciar la foto de don Roberto que ha usado El Nuevo Día ya que el pobre hombre parece una versión boricua de Hitler saludando con la mano alzada, o como si estuviera esperando el ataque del ganso de AFLAC preparado para darle un puñetazo...