Maripily se lamenta de no haber esperado el momento justo

Maripily acaba de darse cuenta de su error al precipitarse en su demanda de divorcio. Hubiera sido mucho mejor haberlo anunciado durante la ceremonia de bienvenida al Hall of Fame, justo al lado de Roberto cuando subiera al podio a agradecer a la organización regidora del deporte en EE.UU. Nos imaginamos el momento: Roberto está en el podio, dice su pequeño discurso de agradecimiento, todos los presentes aplauden. Maripily está a su lado  y cuando Roberto termina, ella se acerca al micrófono. Roberto se detiene para oír lo que él supone serán palabras de apoyo, de felicidad. Todos los presentes están atentos. Maripily da los últimos pasos hacia el micrófono oscilando todo su cuerpo, mira a la audiencia, pone las manos sobre el podio y dice:

Yo quisiera decirles que este hombre que hoy ustedes reconocen no sólo merece entrar en el Hall de la Fama, sino también merece entrar derechito al infierno… No sólo le pega duro a las bolas, sino que me pega a mí también… aunque no esté en bolas. Este hombre que hoy ustedes premian es un mal nacido… un abusador de mujeres, y para colmo de males, tiene AIDS. Está podrido por dentro y no me lo dijo. A saber a cuántas habrá infectado con el virus. Así que justo antes de la ceremonia, encargué a mi abogado a comenzar el papeleo para el divorcio y una demanda por daños y perjuicios… y salgo inmediatamente a hacerme las pruebas del AIDS. Como esté infectada, aquí se va a armar la de San Quintín.

Hoy Maripily se lamenta de haber pedido el divorcio prematuramente. Incluso hoy hubiera podido reclamar la mitad del premio, y de todas las ganancias relacionadas al galardón, como derechos por entrevistas, memorabilia, etc. Sólo si hubiera aguantado unos meses… ¡qué escándalo hubiera sido! La asociación de paparazis y periodistas de la prensa amarilla se lamentan ante la oportunidad perdida.

Así que El Coquí Cojo avisa a la esposa de Iván Rodríguez, sin lugar a dudas el próximo puertorriqueño que entrará de seguro al Hall de la Fama, que si las cosas en su matrimonio van mal o comienzan a ir mal, que no se precipite, que espere a la ceremonia de bienvenida al Hall de la Fama para hacer su anuncio y pedir el divorcio. Incluso que venda la exclusiva de antemano a alguna revista importante.