¿Qué hacemos con Al Gore?

Nos hemos metido en un problema, hemos invitado a Al Gore a que nos visite. Lo primero que hicimos en El Coquí Cojo fue ¿a quién se le ocurrió invitar a este hombre? Y la respuesta estaba delante de nosotros, en la prensa: a la Asociación de Industriales de Puerto Rico (AIPR).

Suponemos que en cuanto llegue le vendarán los ojos y lo llevarán al Caribe Hilton para que dé la conferencia en algún salón de conferencias cerrado, y luego le volverán a vendar los ojos para llevarlo al avión. Probablemente al pensar así no estamos siendo justos con la AIPR. Quizá nos estemos equivocando y la AIPR le enseñe las playas más allá de Isla Verde, las que están llenas de basura, y le enseñen los borrachos y drogadictos en los semáforos, y los enfermos desatendidos por el gobierno. Quizá le digan que el gobierno nunca ha llevado un programa de reciclaje consistente y le digan que casi nadie recicla en este país, y que ya no hay sitio en los vertederos. Pero lo que sí queremos es que le digan que CUANDO EL GOBIERNO PIENSA EN ENERGÍA VERDE, PIENSA EN UN GASODUCTO QUE ATRAVESARÁ LA ISLA DE CABO A RABO.

Vamos, El Coquí Cojo ya le ha dedicado varios artículos a todo esto. Uno de los artículos que ha producido felicitaciones de nuestros lectores ha sido el de la carta a Fortuño por el caso de Vieques. ¿No sería bueno que se hiciera lo que recomendamos en Vieques e invitar al señor Gore a la inauguración del parque eólico? Si convertimos a Vieques en un verdadero bastión verde (es decir, sin gas natural ni petróleo) podríamos invitarle de nuevo y mostrárselo orgullosos.

Pedimos a los que atiendan la charla del señor Gore que no olviden de preguntarle: Señor Gore, los que quieren que se construya un gasoducto gigantesco nos dicen que el gas natural es tan verde como el viento, como el sol, como las mareas, como la energía geotermal… ¿es eso cierto, señor Gore o nos están engañando? A ver qué contesta.

En el periódico salió el siguiente discurso del presidente de la AIPR: "Para la AIPR este evento cumple varios propósitos. Primero, desarrollar conciencia sobre la importancia de fomentar la generación de energía con métodos limpios y renovables y también demuestra nuestro compromiso con la Responsabilidad Social Empresarial. La Asociación de Industriales promueve el desarrollo económico y la calidad de vida de nuestros ciudadanos en armonía con el ambiente. Creemos firmemente que el desarrollo económico no está reñido con la protección del ambiente. Un desarrollo económico sostenible es parte importante de la competitividad de un país y conducente al enriquecimiento de sus ciudadanos. Al buscar el balance entre ambos, logramos un desarrollo sustentable y una mejor calidad de vida para el futuro”.

Ojalá este señor, y toda la AIPR, no hable así por hablar. Ojalá hagan lo que dicen. Obviamente el gasoducto no cumple con ello, así que el gasoducto puede servir para que sepamos si nos están mintiendo miserablemente o no. Estamos seguros que si hablan en serio, la AIPR se opondrá a muerte al gasoducto y que con su fuerza e influencia no se podrá aprobar. Si se aprueba y se construye, es que nos tomaron el pelo, por no decir otra cosa.