La noticia del titingó que se armó en el Senado con la discusión de permitir o no que las agencias puedan pautar anuncios de interés público ha salido hoy en todos los periódicos. El problema mayor es que los anuncios pueden servir de propaganda al partido que se encuentre en el poder en ese momento. Obviamente, en estos momentos, el PNP está de acuerdo y el PPD está en contra. Todos los senadores gritaron, patalearon, se insultaron, bueno, un verdadero escándalo en países como Noruega y Suecia.
Ya lo habíamos avisado, en cuanto pasara el 7 de octubre, día señalado como el Día del Buen Trato, el buen trato se terminaría en nuestro gobierno. Era obvio, si se establece un día como Día del Buen Trato, se establece, por lógica, 364 días de malos tratos. En otras palabras, el modus operandi es el maltrato y la excepción es el buen trato.
Y volviendo a la cuestión de los anuncios de las agencias. No habría ningún problema si el partido en el poder, sea cual sea, utilizara los anuncios para decir que las agencias no funcionan como debieran. A esto el partido de la oposición, fuera el que fuera, no se opondría. El problema de esta solución es que realmente todo el pueblo sabe que ninguna agencia funciona como debiera, por lo que el mensaje de los anuncios se quedaría en un ejercicio de desperdicio de fondos.
La otra opción que podría llevar a un consenso sería que el partido en el poder, fuera el que fuera, alabara constantemente a las agencias, aunque no tenga ninguna razón para ello. En esta opción el problema es que los espectadores sabrían que todo es mentira, pero por lo menos se reirían al ver cuán mentirosos pueden llegar a ser los políticos. Y reírse es importante en estos momentos.
La cuestión fundamental pasa a ser los “colores” y los “emblemas” que se utilizan en los anuncios. La realidad es que a nadie le importa el mensaje ya que todos saben que cualquier alabanza de cualquier agencia es un cuento chino, el problema es el color ya que hay colores que representan a algún partido en particular por lo que El Coquí Cojo sugiere que los anuncios tengan letras negras en fondo blanco, por ejemplo, y se resuelve el conflicto. Otra forma de resolver el conflicto es que las letras sean negras y el fondo negro también, de la misma tonalidad por su puesto (o para hacer la regla más general, que las letras y el fondo sean del mismo color, en la misma intensidad). Si se escogen colores diferentes para las letras y el fondo, entonces sería necesario que no haya mensaje alguno, o que lo que se diga sea “neutral”, por ejemplo:
Ø El Departamento de Salud, trabajando para los enfermos.
Ø El Departamento de la Salud, contigo siempre, en la salud y en la enfermedad y viceversa.
Ø El Departamento de Hacienda, sirviendo a alguien, quien quiera que sea.
Ø El Departamento de Hacienda, haciendo números todo el tiempo.
Ø El Departamento de Trabajo, trabajando para que trabajes o cobres desempleo.
Ø El Departamento de Educación: ni te ayudamos ni te perjudicamos, sino todo lo contrario.
Ø El Departamento de Obras Públicas: Si no llegas, seguirás en la dirección que te has trazado.
Ø La Autoridad de Energía Eléctrica, haciendo posible que trabajes de noche.
Estos ejemplos de anuncios vagos ni ayudan ni perjudican al partido que los pusiera, ni al que en ese momento estuviese en la oposición, ya que los mensajes son “neutrales” y nadie sabría si la cosa va bien o no.
No comments:
Post a Comment