El senador popular José Luis Dalmau acusó al gobierno de invertir más de 40 millones de dólares en lo que él considera propaganda ilegal del PNP por medio de anuncios publicitarios que a primera vista intentan mejorar la imagen de las agencias públicas. El senador alega que el uso de colores y frases en dichos anuncios indica sin lugar a dudas la intención subyacente de mejorar la imagen de la Palma. Añadió que la Ley 203 de 2006 prohíbe la difusión pública con el propósito de exponer programas, proyectos, logros, realizaciones, proyecciones o planes. Dalmau puso de ejemplo la propaganda que se le está haciendo al gasoducto Vía Verde. Tildó todo esto como un claro despilfarro de los fondos públicos porque en realidad se trata de una campaña política del PNP.
El Coquí Cojo reunió a un grupo de expertos en la materia. Luego de dos días de encierro, llegaron a la conclusión que no sería suficiente que el PNP retirara dichos anuncios, ya que la medida no evitaría que la gente que ya ha visto los anuncios conservara en sus mentes la artificial imagen positiva del gobierno ya que habría sido ya aprehendida por el subconsciente. Según el panel de expertos, para resolver definitivamente la ilegalidad se tendría que utilizar la misma cantidad de fondos públicos (unos 40 millones de dólares) en una serie de anuncios diseñados para contrarrestar el daño ya infligido. Entre las ideas resaltan las siguientes:
Anuncios en los que se muestren las filas interminables que padecen nuestros compatriotas en la inmensa mayoría de agencias públicas, como por ejemplo, la AAA. Una serie de anuncios mostraría a cientos de personas esperando incómodas durante horas; niños corriendo por doquier tropezando con las piernas de los que esperan; ancianos que pierden el turno por haberse dormido; gente hablando entre sí quejándose del atroz servicio. Otra serie de anuncios mostraría los constantes errores en los trámites, como por ejemplo, decenas de facturas de lo que ya se ha pagado, la total apatía a cumplir con las cancelaciones de servicios que ya se han solicitado, los errores en el nuevo programa de Mi Salud, etc.
Y por último, en cuanto a la propaganda positiva hecha sobre el gasoducto Vía Verde, el panel de expertos determinó que la única forma para contrarrestar el impacto positivo de la publicidad mostrada hasta el momento requiriría una serie de anuncios donde se mostraría: explosiones gigantescas de gas; muertos regados por doquier; la destrucción total de Cataño; la extinción de las especies de aves en peligro (podría ser la imagen de ejemplares de aves muertas con letreros “yo fui el último Guabairo”); etc.
Para confirmar que dichas medidas serían del agrado del senador popular, El Coquí Cojo habló con él por teléfono y al explicarle las propuestas, el senador añadió que eran de su agrado “siempre y cuando salieran las iniciales PNP claramente en azul en los anuncios”. Y señaló que “no sería mala idea añadir muchas palmas quemadas por los suelos en los anuncios de las explosiones del gasoducto”.
Al preguntarle si no creía que sería un despilfarro de los fondos públicos los 40 millones adicionales necesarios para llevar a cabo estas medidas, Dalmau se limitó a murmurar: “En este caso no sería un despilfarro”.
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