Se requiere un cambio en la administración universitaria

¿No sería sencillo que el gobierno simplemente diera los fondos que han sido ofrecidos con el nombre de Programa Especial de Becas directamente al Banco de Fomento, principal acreedor de la UPR, y se eliminara la cuota, en vez de crear un comité burocrático elegido por el presidente de la UPR para repartir los fondos a los estudiantes que sean elegibles?

¿O es que los 35 millones que el gobierno ha dicho que alimentarían dicho fondo procedente de la lotería no es una cantidad del todo cierta? ¿Es acaso que los 35 millones son simplemente una farsa y que el proceso burocrático que se pretende montar al respecto no tiene intención alguna de repartir dicha cantidad de dinero, o al menos pretendería dificultar que gran parte llegue al estudiantado? ¿Por qué complican la entrega de los fondos de la lotería de esta manera? ¿Y qué pasó con la idea de Fortuño de asignar un pequeño porcentaje de los recaudos de los impuestos de empresas foráneas a la UPR? Digamos que de los 1,300 millones que se esperan recaudar, el gobierno se comprometería con un 3%, por ejemplo, es decir, unos 40 millones más para la UPR este año.

El Coquí Cojo propone que la cuota se elimine inmediatamente, y que la administración universitaria lleve a cabo un bien pensado plan de ajuste financiero de la universidad que incluya una reestructuración a fondo de los procesos burocráticos. No dudamos que la UPR requiere una pequeña reducción de personal, por ejemplo, un 10% de los empleados administrativos; un 10% de los empleados no docentes y de mantenimiento; la eliminación de altos cargos mediante la unificación de funciones; tener 1 vicepresidente en lugar de 3; llevar a cabo una unificación de departamentos (por ejemplo, en la Facultad de Estudios Generales existe en la actualidad 6 departamentos: Ciencias Físicas, Biología, Inglés, Español, Ciencias Sociales y Humanidades, con sus respectivos 6 directores y personal de soporte administrativo. Se podría reestructurar a 3 departamentos: Ciencias, Ciencias Humanas e Idiomas).

Lo que queremos que nuestros lectores entiendan es que en la UPR se puede hacer muchísimo sin tener que recurrir siempre a exigir más dinero a los estudiantes. Por ejemplo, en la UPR hay centenares de profesores que podrían retirarse hoy mismo ya que cualifican para el Retiro, no lo hacen porque perderían cobertura médica, porción de salarios, etc. La administración podría ofrecerles un paquete que facilitara el retiro, al igual que hacen las empresas cuando quieren reducir el número de empleados. Los sueldos de estos profesores son mucho más altos que los que tendrían profesores nuevos que les reemplazaran.

El problema que vemos es que la actual administración ha demostrado no ser apta en la búsqueda de alternativas, por lo que creemos que sería beneficioso que una nueva cúpula de administradores, con experiencia comprobada, sea nombrada.