Ygrí, no te hagas la ingenua, tus horas están contadas

Con respecto a la reunión de hace dos días entre el gobierno, incluyendo a Fortuño, y los estudiantes, Ygrí Rivera, directora de la Junta de Síndicos, señaló: “No (lo sabía). Me tomó por sorpresa. El Gobernador podía atenderlos y el secretario de Estado (Kenneth McClintock) porque sé que había buena actitud para escucharlos y atender sus reclamos”.

El que no lo supieras es normal. El gobierno sabe muy bien que contigo en la reunión, no hay manera de discutir nada de la cuota. Tu intransigencia permanente avala tu incapacidad como administradora. Cuando el gobierno no se vio con otra alternativa que comenzar a intervenir abiertamente (tras bambalinas siempre ha intervenido, por ejemplo, posicionando al presidente de la UPR en el cargo y aumentando el número de síndicos para obtener el control) optó por apoyarte, como era natural, ya que entraba dentro de los “acuerdos” entre ellos y tú para que mantuvieras tu cargo hace dos años. Sin embargo, como los estudiantes han sido persistentes, el gobierno se ha ido dando cuenta del precio electoral que la crisis universitaria le conlleva y finalmente ha optado por “abandonarte” y tirar por la calle del medio y arreglar la cuestión entre ellos y los estudiantes.

Anoche el gobierno y los estudiantes se volvieron a reunir sin la participación de la administración universitaria. El gesto es más claro que el agua que el gobierno ya descarta a la administración universitaria como "participante activo" para cualquier vía de solución. Por otro lado, el gobierno quiere mantener la ilusión de que la administración sigue en el timón y comunica en los medios públicos que su papel es el de simple intermediario "de buena voluntad" entre los estudiantes y la administración, pero es obvio para el buen entendedor que el gobierno está apretándole las tuercas a la administración.

El Secretario de Estado, Kenneth McClintock, presente en ambas reuniones, no permitió que Waldemiro Vélez participara de la reunión de anoche por estar suspendido por la UPR. Sea justa o no la suspensión (es obvio que no lo es) la decisión de McClintock es la correcta ya que no quiere abrir paso a que la administración se moleste y argumente que la reunión no tendría validez al aceptar a un estudiante que no puede ser representante del movimiento estudiantil. Es muy revelador el gesto de los líderes estudiantiles ante la situación. Sólo uno de ellos se quedó afuera como gesto de apoyo a Waldemiro, pero el resto entró a la reunión, por lo que es obvio que entendieron la posición del gobierno en el asunto. Además, el hecho de que hayan entrado a la reunión es señal de muy buen presagio, debe haber una solución muy cercana.

Sin embargo, el gobierno todavía no quiere hacer público su hartura con la administración y está jugando una estrategia hábil para que sobre la superficie se piense que la administración sigue teniendo la última palabra, pero creemos que es obvio imaginarnos la presión que debe estar ejerciendo el gobierno en la terna de incapaces: don José ya se sienta en la mesa de negociaciones, Ygrí no tiene más remedio que seguir el juego como puede, y la rectora de Río Piedras, Ana Guadalupe, se ha mantenido más callada que de costumbre. Los tres nefastos administradores están intentando mantener las apariencias, saben muy bien que sus cargos están en la cuerda floja.

Por otro lado, el argumento de McClintock de que el gobierno no puede traspasar el Fondo Especial de Becas directamente al Banco de Fomento, como pretenden los estudiantes, ya que según él se supone que las becas se repartan por razones económicas entre los estudiantes de menores recursos es una soberana TONTERÍA. La razón es simple, si hubieran sido tan sensibles ante la realidad económica individual de los estudiantes, no hubieran establecido una cuota igual para todos en primer lugar. Por lo tanto, le aconsejamos a los estudiantes que utilicen este argumento que les estamos dando y no desistan en la idea de que el dinero vaya directamente al Banco de Fomento y que se recalcule una nueva cuota IGUAL para todos.

Cuando el gobierno dio la alternativa del Fondo Especial de Becas, nutrido por ganancias de la lotería, no estaba todavía en la posición de echar de lado a la administración universitaria del todo, por lo que sugirió que el Fondo fuera repartido por un comité elegido en su mayor parte (5 de 7 integrantes) por don José de la Torre. En su día, El Coquí Cojo ya identificó esto como un disparate ya que añadir un proceso burocrático más en las manos de la UPR impediría que los fondos llegaran a sus beneficiarios de una manera efectiva. Además, vimos el gesto como una posible señal de que la cantidad de 35 millones que calculaba el gobierno para el fondo era una mentira y con lo del comité repartidor se aseguraba que sólo se repartiera una cifra mucho menor. Invitamos al lector a leer nuestras noticias al respecto (ya hace varias semanas).

Como las cosas han cambiado, y el gobierno ha demostrado abiertamente con las dos reuniones “sin administradores” que está dispuesto a negociar por ellos mismos, creemos que si los estudiantes aprietan en lo que el fondo llegue directamente al Banco de Fomento, aduciendo el argumento que le estamos proporcionando, el gobierno cederá al respecto. Incluso le conviene, ya que sería otra señal de que el gobierno no depende de la administración universitaria.

Ya lo hemos dicho en repetidas ocasiones, el gobierno cobra fuerza y mejora la opinión pública si toma la crisis en sus manos y la resuelve directamente con los estudiantes. El Coquí Cojo ha mantenido que aquí el chivo expiatorio será la administración universitaria si los estudiantes lograban mantenerse fuertes. Les aconsejamos a los estudiantes a no ceder en estos momentos hasta que una solución VERIFICABLE sea lograda y que consideren aceptable.

Toda solución que incluya una cuota, por poca que sea, le proporciona oxígeno a la administración universitaria. Entendemos que una propuesta de una cuota del orden de $200 ANUALES sería una solución intermedia muy apetecible al movimiento estudiantil, pero tampoco dudamos que una solución sin cuota sería beneficiosa a largo plazo ya que creemos que provocaría el despido (o renuncia forzada) de don José y doña Ygrí, lo que a su vez impediría futuras dificultades y hostilidades.

Sí, querido lector, don José, doña Ygrí y doña Ana han demostrado un carácter vengativo digno de las películas de muñequitos. Ninguno de ellos pudo aceptar la supuesta “derrota” de la primera huelga. Después de la huelga se tomaron medidas justicieras como disminuir los estudiantes de nuevo ingreso en más de un 30%, se despidieron a centenares de profesores sin permanencia, se persiguió a un grupo de estudiantes que se quedó a vivir en la residencia de estudiantes que se encuentra dentro del recinto de Río Piedras, y finalmente la imposición de una cuota INNECESARIA. Si esta gente se queda en sus cargos, tendremos muy probablemente problemas en el futuro. No lo decimos porque tengamos una vendetta contra ellos, simplemente porque han demostrado ampliamente su incapacidad.